Un sonido de calidad y una mecánica precisa

Desde 1991, el taller de Raúl Martín Sevillano produce clavicémbalos, espinetas y clavicordios. La calidad de nuestros instrumentos, avalada por el juicio de reconocidos especialistas, se basa en la obtención de un sonido noble junto a una mecánica ligera, sólida y precisa.

Una cuidadosa selección de los materiales y un proceso de elaboración esmerado y enteramente artesanal en todas sus partes (caja, tabla armónica, cuerdas…), dan como resultado un sonido brillante y de gran refinamiento. Las tablas armónicas están construidas con pino de Soria criado en la Sierra de los picos de Urbión a más de 1.100 m de altitud, y secado de manera natural por el cierzo del Moncayo.

Igualmente importante es la consecución de una mecánica segura y agradable al tacto del clavecinista. El intérprete debe “sentir” en las yemas de sus dedos la pulsación del plectro bajo la cuerda. Para esto es fundamental que los teclados sean extremadamente ligeros. En el equilibrado de los teclados, podemos decir que esculpimos cada tecla.

Todos los instrumentos son transpositores 415 – 440 Hz. 

Construimos copias fieles de originales debidos a los mejores maestros antiguos (Ruckers, Couchet, Hemsch…) conservados en museos y colecciones particulares, también instrumentos inspirados en originales de las diferentes escuelas.